El Juzgado de lo mercantil de Navarra ha dictado sentencia este pasado mes de enero, absolviendo a uno de nuestros clientes, administrador de una empresa que tuvo que declararse en quiebra, de una deuda de 764.596,94 euros que le reclamaba tanto el Administrador Concursal como el Ministerio Fiscal, proveniente principalmente de la deuda impagada por la empresa con Hacienda Foral de Navarra.

La sentencia entiende que la conducta del administrador no contribuyó ni a la generación ni a la agravación de la situación de insolvencia de la empresa, por lo que ante la ausencia de esta justificación le absuelve de tener que cubrir el déficit patrimonial que se le reclamaba.

Literalmente el Juzgado señala que: “El informe de la Ad. Concursal y el Dictamen del M. Fiscal se limitan a pedir la indemnización, cuantificando el perjuicio en la totalidad del montante pendiente de pago del Préstamo con Caixabank 197.043,66 euros y la Deuda pendiente con Hacienda Foral Navarra 567.553,28 euros que la propia AC sitúa su origen en la constitución de la sociedad y el certificado de la deuda contempla desde el año 2012. Pero dichas deudas no se enlazan con ninguna conducta u omisión concreta del administrador […], ni se justifica el nexo causal entre la acción y el daño, por lo que no procede la condena a esa indemnización.

Gracias a RBN Reclamaciones Bancarias, nuestro cliente ha conseguido salvar su patrimonio personal, y que no le reclamen las deudas de la empresa.